Transvulcania caminando (GR-131 El bastón al revés) III

Llega el amanecer y nos levantamos en el refugio de Punta de los Roques. Lo primero que hacemos es salir para ver que día nos espera y lo más importante para mirar hacia la Caldera de Taburiente y apreciar la grandeza de este monumento natural desde un lugar magnífico para su observación.

Amaneciendo en Punta de los Roques

Punta de los Roques (Llenándose la hoya)

La verdad es que la caldera es un espacio único. Podemos ver a lo lejos el Roque de los Muchachos, y comentamos que es nuestra siguiente parada. Como primera impresión se antoja muy lejos, pero somos conscientes de que hasta allí solamente hay 14 kilómetros. Eso sí, bordeando la caldera de Taburiente, en un constante sube y baja, por lo que se conoce como "ruta de la crestería".

Comenzamos con un largo y peligroso descenso, mucha piedra suelta y el abismo a nuestra derecha. Subimos un poco y tenemos una preciosa vista de la caldera, con las nubes, movidas por los vientos alisios entrando en su interior.

Vista de la Caldera

Las "cascadas de nubes"

Es un paisaje fantástico, una cascada de niebla entrando en la caldera, pero unos kilómetros después cambiaría nuestra opinión sobre este efecto. Seguimos caminando. La ruta de la crestería hace honor a su nombre, subiendo un pico tras otro, Pico de Piedra llana, Pico de la nieve...y Pico de la Cruz, donde nuestra aventura tuvo fin.
Cuando entramos dentro de la cascada de niebla, el clima cambió radicalmente, un viento muy fuerte comenzó a azotarnos por el costado, y hasta sufrimos el efecto conocido como lluvia horizontal, es decir no estaba lloviendo pero nosotros estábamos calados, hasta aparecieron gotas de agua en mis pestañas. Cuanto menos...curioso.

A esas alturas de la ruta, ya vestíamos forro polar y cortavientos, pero nuestras manos estaban descubiertas, y la sensación térmica nos hacía perder sensibilidad en los dedos. Aún lo pienso y me cuesta creerlo, antes de entrar en la nube, manga corta y sudando (con el buen día que amaneció!). 


En Pico de la Cruz y con la posibilidad de salir a carretera, decidimos abortar, se nos hacía largo pensar en llegar a Tazacorte con ese tiempo. Nada más comenzar a hacer autoestop, un matrimonio alemán (que había subido al Roque de los Muchachos a tomar un café??) paró a cogernos, y es que creo que dábamos pena. Nos bajaron a Santa Cruz y allí tomamos el autobús hasta Los Canarios. 


Experiencia única e irrepetible, han sido muchos momentos buenos y actividades que para nosotros eran extraordinarias hasta ese momento. Espero que a partir de aquí podamos repetir muchas como esta. Y por supuesto el año que viene volvemos para completarla!!

Algunos consejos para la ruta completa (Faro de Fuencaliente - Puerto de Tazacorte):



- Hay que tener una buena preparación física previa, se inicia a nivel del mar, sube hasta 2.085 metros (Las Deseadas), baja hasta 1.440 m.s.n.m (refugio del Pilar), sube de nuevo hasta 2.426 m.s.n.m (Roque de los Muchachos) y finalmente baja a nivel del mar (Puerto de Tazacorte). Todo esto en unos 80 kilómetros.



- Nuestro consejo es realizar la ruta completa en 3 días, haciendo una primera etapa en el refugio de El Pilar, y una segunda en el Roque de los Muchachos (al raso). De todos modos hemos comprobado que se puede hacer en dos días, caminando unas 12 horas diarias.


- El único refugio libre es el de Punta de los Roques. Si queremos dormir en otro, hay que reservar. Para conseguir las llaves dejo un enlace a la web de reservas: http://www.senderosdelapalma.com/refugios/refugios.php


- Disponibilidad de agua: Refugio de Fuente de los Roques, Refugio del Pilar, Refugio de Punta de los Roques (hay que potabilizar con pastillas) y Roque de los Muchachos.

- Llevar siempre gafas de sol, protección solar, gorra, unas buenas botas y ropa de abrigo, sirva nuestra experiencia de ejemplo. Nunca sabes lo que puedes encontrar en alta montaña.